Estimado blog.
Hoy es lunes de Pascua, y último día del paro obligatorio retornable. Mañana volvemos al teletajo, o teletrabajo cómo le llaman algunos.
Hablando con un amigo, volvió a salir el tema de marca personal contra marca corporativa, y cuándo es mejor usar una y otra.
La respuesta es siempre la misma. Depende.
Cuando un proyecto está muy vinculado a una persona, y esa actividad depende exclusivamente del saber hacer de esa persona, siempre tiene que ser marca personal.
Sería el caso por ejemplo, de un deportista de élite, un directivo, o un profesional cualificado que quiera poner en valor su imagen profesional y presentarla como un valor tangible en caso de ofrecer sus servicios.
En cambio es mejor usar marca corporativa, cuando el proyecto, aunque lo empiece una única persona, tenga posibilidades de ampliarse con trabajadores, e incluso admitir nuevos socios. En ese caso, es posible que se tenga que renombrar cuando ya lleve unos años funcionando, con el consiguiente trabajo añadido de volver a dar a conocer la marca nueva.
Sobre todo, la principal ventaja que tiene la marca corporativa, es que si más adelante quieres vender o traspasar el negocio, es mucho más fácil que si el negocio tiene marca personal, que lo dificultará mucho.
Carrera profesional. Marca personal
Ahora que los currículums ya no están en fotocopias sino que están en LinkedIn, o en cualquier otra red social o portal de empleo, es hora de diferenciarse y tomar posiciones.
El tráfico de emails con currículums que vamos a ver en los próximos meses, va a ser como el de la operación salida.
Si no te conformas con un perfil en LinkedIn, lo mejor es tener un sitio web de marca personal, con una buena presentación de tu titulación, tu experiencia, si tienes portfolio (porque tú puesto era de diseñador, fotógrafo o similares), también hay que ponerlo. Y si además, escribes regularmente en el blog, contando experiencias, cursos, etc… Mejor que mejor. Todo suma.
Vamos a suponer…
Que alguien pierde el trabajo. Es un profesional cualificado que puede trabajar de lo suyo por cuenta propia, pero primero quiere buscar durante un tiempo por si encuentra algo por cuenta ajena.
Mi recomendación.
Sitio web con marca personal. Estoy hablando con un sitio web bien hecho, no un churro de esos hecho con plantillas gratuitas.
Con dominio propio y bien maquetado. Y enlazado con las redes sociales que tenga. Importante cuidar el blog. Escribir entradas regularmente con lo que se va haciendo (formaciones, etc), incluso contando cómo se está haciendo la búsqueda activa de empleo. El contenido del blog es lo mejor para posicionar la web.
Si en el tiempo estipulado no se encuentra nada, y se activa el plan de emprender, es el momento de crear la marca corporativa. Y salir al mercado con la marca.
¿Hay que mantener las dos webs?
Si se escribe regularmente en el blog, es posible que tenga comunidad, contactos, enlaces, etc. A todos ellos hay que comunicarles la intención de emprender. Incluso se les puede pedir feedback sobre la idea. Te sorprenderá saber la gente que te ofrecerá consejos y ayuda en forma de contactos
No hay que borrar, ni abandonar la web personal, simplemente se deja de estar tan activo en ella y centrar todos los esfuerzos en la nueva web corporativa, derivando todos los contactos a ella para que posicione lo antes posible y empezar a encontrar clientes.
¿Y tu?
¿Lo harías así también o cambiarias alguna cosa? Te animo a dejar tus comentarios a continuación, pero si prefieres enviarme un mensaje privado puedes hacerlo en la página de contactar.