Estimado blog.
Estamos rematando la semana 8 de confinamiento y si volvemos la vista atrás, nos damos cuenta que, en apenas ocho semanas la realidad nos ha pegado una patada en el culo, y nos ha adelantado unas cuantas casillas de golpe, en algo, que nos resistíamos a implantar.
Empezamos…
- El teletrabajo es una realidad, y prácticamente todo el trabajo de oficina, (ya sea trabajo técnico o trabajo administrativo) se puede hacer desde casa sin ningún problema y con unas tasas de productividad sorprendentes.
El coche y los desplazamientos privados en el mismo, es el gran culpable del cambio climático. El transporte de mercancías ha seguido funcionando, y sin embargo, la contaminación ha descendido de forma evidente en apenas unas pocas semanas. - La digitalización de las pymes y pequeños negocios, ya no es una opción. Es una necesidad y todos los pequeños negocios que contaban con algún sitio web, si han sabido adaptarlo a las necesidades, han podido mantener el contacto con sus clientes sin demasiados problemas. Los que no tenían nada se han quedado muy tocados. No es hora de lamentarse, es hora de aprender la lección y reinventarse.
- La educación también tiene un gran aliado en la red. Las academias privadas lo tienen más claro, y la mayoría han podido adaptar sus clases para hacerlas online; pero la educación pública… ha tenido un seguimiento desigual. Algunos profesores si que han podido dar clase, con las herramientas adecuadas, pero otros, no. Apenas algún e-mail, pidiendo trabajos y poco más. Y gran parte del problema está en la formación del profesorado en este nuevo tipo de docencia.
- Formación continua a clientes. Exactamente, es eso. Muchas empresas que nada tienen con la formación, han encontrado un filón en la formación online. Es decir, webinars gratuitos para que sus clientes usen sus productos de forma más eficiente. Trucos, consejos, etc… Con esto se consigue una evidente fidelización a la marca.
Resumiendo.
Si dejamos el coche aparcado solo para grandes desplazamientos, y usamos la bici para el día a día; viviremos más y mejor, y ayudaremos a la naturaleza a frenar el cambio climático.
Si digitalizamos nuestro pequeño negocio, podremos conseguir nuevos clientes y podremos mantener el contacto con los que ya tenemos de forma natural.
El futuro de la enseñanza es mixto. Online y presencial.
Ofrecer contenido gratuito a nuestros clientes, con webinars, cursos y nos mantenemos atentos a sus necesidades, convertiremos a estos clientes a seguidores evangelizadores. Y eso es oro para cualquier empresa.
¿Y tu?
¿Que conclusiones has sacado durante esta pandemia? Puedes dejar tus comentarios, a continuación o también puedes enviar un mensaje privado en la página de contactar.
Bueno, espero que os haya gustado la entrada, y os recuerdo que el miércoles hablamos de logos y marcas. No te lo pierdas.