El verano está para desconectar, sí. Para poner los pies en alto, comerte una paella mirando al mar, o ver cómo la montaña se traga tu cobertura y te obliga (por fin) a parar.
Pero… ¿y si también lo aprovechas para hacer algo que te acerque a tu mejor versión?
No hablamos de aprender a hacer pan de masa madre, ni de esos propósitos que duran lo que tarda agosto en acabarse. Hablamos de una habilidad tan poderosa como saber idiomas, tan transversal como manejar un Excel, y tan valiosa como una recomendación directa al CEO.
Hablamos de saber vender.
Vender no es lo que te contaron
Olvida lo que piensas cuando oyes “vender”. No es llamar a puerta fría, ni perseguir a nadie por el pasillo de un centro comercial. No es insistir hasta que te bloqueen el WhatsApp.
Vender es convencer. Es comunicar con intención. Es ser capaz de mostrarle a alguien por qué tu solución es la mejor. Y eso sirve lo mismo para cerrar un contrato que para que te elijan a ti en una entrevista de trabajo, en una licitación, o incluso en una cita.
El problema es que nadie te lo enseñó. Ni en el instituto, ni en la universidad, ni en los cursos de empresa.
Y por eso vas por la vida sabiendo hacer lo que haces… pero sin saber vender lo que haces.
La habilidad que te da ventaja (en cualquier sector)
Puedes ser enfermero, programadora, diseñador, comercial, autónoma o repartidor. Da igual.
Si sabes vender, tienes un súperpoder.
Porque no todo el mundo sabe cómo generar confianza, cómo estructurar un mensaje de forma clara, cómo responder a una objeción sin sonar desesperado.
Y eso se traduce en clientes, oportunidades, contactos y mejoras salariales. Literalmente.
Aprovecha el verano (y no, no hablamos de hacer otro curso de inglés)
Este verano te puedes leer otro thriller escandinavo, puedes devorar otra lista de series o puedes hacer scroll infinito en Instagram.
O puedes hacer algo más: aprender a vender. En serio.
Con calma, a tu ritmo, en la tumbona, en el tren, o con un café.
Porque cuando vuelvas de vacaciones con esta habilidad entrenada, serás otro.
Tendrás más claridad, más herramientas, y sobre todo, más control sobre tu carrera.
Y para eso, tienes esto:
📘 “Vender como un cabrón”: directo, claro y sin filtros
- No escribí este libro para adornar. Lo escribí porque sé lo que cuesta vender cuando nadie te ha explicado cómo hacerlo bien.
- En este libro no hay relleno, ni teorías académicas.
- Hay práctica. Casos reales. Ideas que puedes aplicar mañana mismo.
Desde cómo definir tu objetivo de ventas, hasta cómo dominar una reunión, usar bien el WhatsApp, gestionar objeciones, o blindarte contra las puñaladas por la espalda dentro del equipo.
👉 Cómpralo ya en Amazon (tapa blanda o Kindle)
También disponible con Kindle Unlimited, gratis para suscriptores.
🎁 Sorteo para suscriptores del blog
Y si eres de los que todavía se resisten a comprar a la primera, te lo pongo fácil:
Entre todos los que se suscriban a este blog entre la publicación de este artículo y el 31 de agosto, sortearé un ejemplar en papel del libro dedicado personalmente.
Solo tienes que dejar tu correo en el formulario y entrarás directamente en el sorteo.
Es gratis. Y además recibirás otros contenidos prácticos sobre ventas, marca personal y estrategia.
✅ Suscríbete gratis al blog y participa en el sorteo
¿Por qué ahora?
- Porque no necesitas esperar a septiembre.
- Porque no hace falta que empiece el curso para que empieces tú.
- Y porque este es el momento perfecto para mejorar sin la presión del reloj o de las reuniones.
Empieza hoy. Lee una página. Toma una nota. Aplica una idea.
Y cuando vuelvas a tu trabajo en septiembre, estarás jugando en otra liga.
Recuerda: saber vender no es algo que “te toca” hacer. Es algo que eliges aprender.
Y si lo haces bien, puede ser lo mejor que te pase en toda tu vida profesional.